Dra. Guadalupe Aba Trigo – Pediatra
Es una enfermedad común entre los meses de otoño e invierno y que afecta a los niños menores de 2 años de edad. Es causa frecuente de hospitalización, especialmente en los menores de 6 meses. Está causada por un virus, siendo el más frecuente el Virus Sincitial Respiratorio (VRS), seguido por el Adenovirus, Influenza y Parainfluenza.
Los niños con mayor riesgo son los prematuros, los que no han recibido lactancia materna, los expuestos al humo del cigarrillo y los que acuden a la guardería. Ocasiona una inflamación aguda de las vías aéreas inferiores de pequeño calibre (bronquiolos) y producción de exceso de mucosidad en ellas.
Se manifiesta como dificultad para respirar y “pitidos” en el pecho. A partir de los 2 años de edad, los bronquiolos aumentan su tamaño y ya no se presenta esta entidad. Suele comenzar como un catarro y, luego de 2 o 3 días, los padres notan un empeoramiento con más tos, dificultad para respirar, pitidos, fiebre, disminución de la alimentación e irritabilidad.
¿Cuándo consultamos?
Ante cualquier sospecha de Bronquiolitis deben acudir a la consulta de su pediatra para que determine el tratamiento y realice el seguimiento pertinente en cada caso. Si bien la mayoría de las Bronquiolitis son leves y sólo requieren tratamiento sintomático, hay casos en que hay empeoramiento y se requiere la hospitalización. Deben tener en cuenta los siguientes signos, que son motivo de consulta a los Servicios de Urgencias: si aumenta mucho la dificultad respiratoria, no come, vomita con frecuencia, si hay color azulado de piel o mucosas, decaimiento excesivo, está inconsolable, hay mal estado general, respira con el abdomen o deja de respirar por momentos.
¿Cómo se previene?
La medida de mayor sentido común es la de tratar de mantener alejados a los lactantes de cualquier persona que presente tos o catarro. Adicionalmente, pueden seguirse los siguientes consejos:
– Lavar las manos de los niños con agua y jabón frecuentemente.
– Si alguien de la familia tiene alguna infección respiratoria, debe lavarse las manos con frecuencia y evitar que haya contacto con las secreciones. Los padres pueden usar mascarilla.
– Evitar llevar a los menores de 3 meses a la guardería, especialmente si fue prematuro.
– Evitar el contacto del niño con otros niños que acudan a guardería.
– No exponer a los niños al humo del cigarrillo.
– Evite permanecer mucho tiempo con el niño en la sala de espera de las consultas médicas, pues es el segundo lugar de mayor contagio después de la guardería.
– Evite acudir a sitios con aglomeraciones de gente (autobuses, centros comerciales, fiestas infantiles, etc).
¿Cómo se trata?
Hasta la actualidad no se ha descrito tratamiento específico. Básicamente se utilizan medidas generales para los síntomas: lavados nasales con suero fisiológico antes de la alimentación, mantener en posición semi-incorporada, hacer tomas de alimento más pequeñas y frecuentes, tratar la fiebre. No existe ningún medicamento que cure la Bronquiolitis. Los antibióticos no funcionan por tratarse de una infección vírica. Su uso está restringido para las complicaciones bacterianas secundarias a la enfermedad. Los broncodilatadores se usan para reducir un poco la obstrucción respiratoria aunque no funcionan en todos los casos.
¿Cómo se contagió?
El virus se transmite de una persona a otra. Puede ser un niño o un adulto que presente una infección respiratoria banal. El contagio ocurre a través de gotitas transportadas por el aire que genera la persona enferma al toser, reír o estornudar; y también por el contacto directo con superficies o las manos contaminadas por secreciones nasales u orales de estas personas. Esto implica que los objetos (platos, vasos, juguetes) que hayan sido tocados por un enfermo después de estornudar o toser, constituyen un vehículo eficaz de transmisión, pues se ha demostrado que el virus pueden sobrevivir hasta 7 horas en estas superficies.
Es por ello que la mayoría de los brotes ocurren en las guarderías, donde los niños comparten juguetes y otras pertenencias.
¿Cuánto le va a durar?
La evolución de la enfermedad es lenta. Los síntomas pueden persistir hasta 4 semanas. E incluso posteriormente, pueden presentarse cuadros respiratorios sucesivos de tos y dificultad respiratoria semejantes al proceso inicial, pero más atenuados.
También pueden consultar:
www.seup.org En las hojas informativas para padres.
www.neumoped.org. Buscar la pestaña de Protocolos y poner Bronquiolitis en su buscador